domingo, 26 de junio de 2011

El sentimiento mayoritario del país...

6 meses después de cambiar el limite de velocidad de 120 Km a 110, ahora el Gobierno vuelve a cambiarlo porque "conecta con el sentimiento mayoritario del país..."

Adelantando al personal, que personalmente esto ni me va ni me viene: no tengo carné de conducir, uso el (deficiente) transporte público, la velocidad me da vértigo, tengo un taxista particular, y que 10 km arriba o abajo no creo que importe mucho...

Bueno pues adelantando todo eso y todas esas consideraciones, me opongo a esta medida. No por lo conveniente, o no, de cambiarlo. Sino por la argumentación. 

Es absolutamente deleznable e hipócrita que se utilice el argumento del "sentido mayoritario del país" para una decisión que es banal en comparación con otras. ¿Por qué no se utiliza el mismo rasero para otras decisiones políticas que son más rechazadas que subir o bajar 10 km la velocidad? Medidas de ataque a los derechos sociales y laborales que han sido muy criticadas -y que han provocado una Huelga General- como por ejemplo: implantación del Plan Bolonia, bajada del sueldo a los funcionarios, Reforma Laboral, Pensionazo, Reforma de la negociación colectiva,...

¡Ah! que eso se lo decreta directamente los mercados (los cuales tienen nombres y apellidos aunque se intente ignorar).

viernes, 24 de junio de 2011

¿Comienzo...?

Mientras intento estudiar el Periodo Formativo de las Culturas Amerindias -en un breve receso- he creado este blog, sin saber si lo voy a utilizar o caerá en el olvido, como otras tantas cosas que comienzo y no continuo con ellas. De momento ahí esta la cosa.

Si este blog continua en el tiempo se convertirá en un cúmulo de reflexiones, ralladas, tonterías, absurdo y política. 

El nombre viene de los 14 km que separan mi pueblo: Yunquera de Henares, de la gran urbe: Guadalajara. Y lo del ancho camino, por esa canción que de Victor Jara que representaba la ilusión de la llegada de Salvador Allende a La Moneda. Pues para los que nada tenemos siempre cabe la ilusión y la esperanza.

Pues eso... ¿empezamos?